jueves, 15 de agosto de 2013

Cultura de Colombia


Ejemplo de baile folclórico colombiano.
 
La cultura de Colombia es el producto de la mezcla racial de los indígenas americanos, de los blancos europeos, en especial llegados de España, y de los africanos traídos por los conquistadores.
La consecuencia de la mezcla fue un país multiétnico con culturas y rasgos diferentes de acuerdo a cada región. En la Región Andina predomina la herencia indígena y europea, mientras que la Región Caribe se caracteriza por un pasado mezcla europea, indígena y africano. La región que da al océano Pacífico se caracteriza por las culturas negras e indígenas puras.
Sin dudas, esta variedad de culturas da lugar a una gran riqueza de tradiciones, que se expresa tanto en el arte como en las artesanías, la arquitectura, la pintura o el cine y la fotografía.
Según las estadísticas, Colombia cuenta con 87 pueblos indígenas que utilizan alguna de las 64 lenguas nativas. Por otra parte, cuenta con varios millones de habitantes afrocolombianos, más de 38 millones de blancos y mestizos, doce mil gitanos, y una gran cantidad de inmigrantes de diferentes lugares. Sin dudas, podríamos hablar de un crisol de razas que consigue vivir en armonía respetando las diferencias ancestrales.
 En el archipiélago de San Andrés y Providencia, la población mayoritariamente raizal habla inglés.
Como consecuencia del aislamiento geográfico y la dificultad de acceso entre las diferentes regiones del país, se desarrollaron con el paso del tiempo subregiones muy distintivas y variadas culturalmente. Debido a la gran diversidad es difícil agrupar las diferentes subculturas del país, pero pueden considerarse a grandes rasgos las más representativas, entre las que se encuentran:
Ya desde la época precolombina se encuentran las primeras manifestaciones de la cultura colombiana, de la cual se conservan restos de las culturas Muisca (cerámica, vasos, estatuillas), Quimbaya (orfebrería), creadora de un auténtico tesoro de carácter funerario que se conserva en el Museo del Oro de Bogotá, y Tayrona con sus grandes poblados, terrazas de cultivo, escalinatas, entre otras, localizados en la Sierra Nevada de Santa Marta.